Se trata de un proyecto cultural postulado por la Unión Comunal de Juntas de Vecinos, ejecutado por el pintor local, Gastón Tobar. Gastón Tobar Se trata de un proyecto cultural postulado por la Unión Comunal de Juntas de Vecinos, ejecutado por el pintor local, Gastón Tobar.

Un nuevo rostro se puede apreciar en el principal acceso a Molina, tras la inauguración oficial del mural costumbrista que da la bienvenida a quienes ingresan a la comuna desde la Ruta 5 Sur.

En pleno paso bajo nivel del cruce San Pedro se encuentra la obra del pintor local autodidacta, Gastón Tobar, quien efectuó un arduo trabajo durante meses para llevar su arte desde la imaginación hacia la realidad.

Todo esto se materializó gracias a un proyecto postulado por la Unión Comunal de Juntas de Vecinos con estrecha asesoría de la Corporación Municipal de Cultura, encontrando financiamiento en el Gobierno Regional.

CEREMONIA

Tomando todos los resguardos para evitar contagios del Covid-19 o Coronavirus, se realizó una ceremonia simbólica para descubrir la serie artística, en donde la alcaldesa Priscilla Castillo tuvo especiales palabras para agradecer al autor.

“Son unos murales maravillosos de Gastón Tobar, cuya obra no solo se puede apreciar en este paso bajo nivel, sino que también en el de Puente Alto. Son pinturas que muestran la realidad de nuestra comuna y del campo chileno, con maravillas como las Siete Tazas y el Salto de La Leona, además de homenajear el trabajo de los agricultores. Es una forma de plasmar lo que somos como comuna”, dijo la primera autoridad comunal, quien estuvo acompañada de Mirna Fernández, presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos.

INSPIRACIÓN VITIVINÍCOLA

Consultado por el proceso creativo que desembocó en las pinturas, Gastón Tobar explicó que “fue bastante largo, porque tuve que hacer las composiciones, recolectar material y situarme en lo histórico de la ciudad.

Respecto a su inspiración, el artista reconoce que “al ser el corazón vitivinícola de Chile, obviamente le di bastante importancia a la vendimia y a la parte turística, como también a la representación agrícola mediante la manzana”, añadiendo que “las pinturas son terapéuticas; para mí, la pintura es total, porque sirve mucho para reflexionar”.

Por último, este pintor autodidacta manifiesta sus esperanzas de que “en los próximos gobiernos, con una nueva Constitución, el arte debe ser un derecho humano y no solo entretención. Aquí, en Molina, me siento bastante apoyado, sobre todo por la alcaldesa Priscilla Castillo, que entiende bien el arte y me parece que eso hace que tenga mucho más sentido apoyar este tipo de expresiones culturales”.